Explosión Literaria

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Lengua de Manual


Lengua de manual
Silvia Hopenhayn Para LA NACION
El "cómo se dice" suele estar reñido con el "cómo se escribe". Y la gramática se ubica entre uno y otro, arbitrando la disputa. No es una ley ni un estamento. Pero su régimen tiende a ser longevo. Y, a veces, arrastra prejuicios o arcaísmos que agrandan la brecha. ¿Miedo a la lengua suelta, a soltar la lengua? Bien o mal decir, ésa es la cuestión (aunque esto exceda la gramática).
En todo caso, el manual más antiguo es Astadhia ia, un estudio sobre el sánscrito escrito por Pánini en la India unos 500 años a.C. Se conocen también las disertaciones de Sócrates y de Aristóteles, siempre renovadoras y atractivas. Pero el primer tratado completo fue compuesto por Crates de Malos en el siglo II a.C. Lo más llamativo es que el libro que nos rigió durante algunos siglos fue la Grammatica , de Antonio de Nebrija. Y, vaya coincidencia -como si el estatuto de la lengua dictaminara el sentido de la historia-, ese manual fue publicado en el año 1492. Desde entonces, fuimos colonizados por las prescripciones gramaticales de España, o sea, el deber del decir.
Otra fecha importante, con respecto a la gramática académica, es 1931, período de entreguerras en el que se puso al día la sintaxis. Desde entonces, la lingüística y la sociolingüística, junto con la semiótica y las gramáticas generativas de Chomsky, no han cesado de discutir acerca de la normatividad del lenguaje. Ahora aparece una suerte de resultado ecuánime, o que intenta serlo, en la Nueva gramática de la lengua española , presentada como manual, editado por la Asociación de Academias de la Lengua española, con casi mil páginas.
El trabajo duró once años y actuaron 22 academias de la lengua española, que establecieron normas lingüísticas para todos los hispanohablantes, bajo los siguientes criterios: colectivo (variables geográficas y sociales de la lengua), panhispánico, descriptivo (no prescriptivo, más cercano a las distintas formas de construcción), práctico (referencia para estudiantes y profesores de español), normativo (usos recomendados y desaconsejados) y sintético (conjuga tradición y novedad).
Puede resultar útil hallar en estas páginas la definición de un uso, pero al mismo tiempo provoca cierta comicidad el intento académico por ceñir algo tan móvil, cambiante y subjetivo como la lengua. Sobre todo, en tiempos de lenguajes construidos, desde el esperanto hasta los propios lenguajes de la ficción, como el "tlhingan", el idioma de los klingon, la raza humanoide del universo de Viaje a las e strellas, o el "quenya", la "alta lengua" de los elfos de Valinor, una de las quince ideolenguas inventadas por Tolkien, o el "finneganian", como llama Umberto Eco al creado por Joyce.
Más allá de las definiciones y ajustes gramaticales, necesarios quizás en ámbitos estrictamente académicos, lo novedoso de este manual es la aplicación de miles de citas literarias, mediáticas y de la oralidad que vivifican la teoría. Un ejemplo: "Admiten una interpretación atributiva de naturaleza igualmente estereotípica de los verbos formados sobre nombres de animales. Esa interpretación se suele asociar al comportamiento que se les atribuye, como puede apreciarse en caracolear, cotorrear, gatear, mariposear, etc". Y citan del Adan Buenosayres de Marechal: "Me veo? ante una muchedumbre de gaznápiros que me alacranean". La vida es bella en su decir.

2 comentarios:

El inmenso Julio Cortázar, utilizó en su basta geografía literaria, diversos recursos con palabras que él inventaba (podría nombrar cientos de ellas), en las cuales, su interpretación, quedaba a cargo del lector: podría ser un significado angelical, o un insulto. Cortazar, seguramente escribió basado en estos tratados. Sin embargo, otro caso que no quiero dejar de citar, es el del gran Sarmiento (pongo como ejemplo a "Facundo"), que, en su obra, deja sentado los tratados de su epoca, y aun más, crea nuevos preceptos para futuro, que luego, los grandes maestros contemporáneos utilizaron, apelando tambien a los tratados actuales, donde, seguramente, aprueban creaciones del hombre que escribió para el futuro: SARMIENTO. Cortazar y Sarmiento, fueron creadores de estilo, y de palabras para tener en cuenta al momento de razonar.
Lucas Atencio

 

Interesante el articulo, ahora veo como habla y escriben algunas personas...
Diego Araujo

 

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